Cuando bailamos, nos tocamos...

La importancia del contacto mientras bailamos.





Qué importante es sacar enseñanzas de todas las oportunidades que la vida nos da. A veces, conseguimos más de lo que esperábamos, de los lugares más inesperados.

Esto me pasó ahora que estoy leyendo un poco sobre Reflexología, interesante disciplina que ha ido adquiriendo cada vez más adeptos entre los profesionales de diversas ramas que se dedican a tratar las dolencias de salud de las personas. Otro día hablaré sobre qué es esta disciplina y cómo puede ser útil para nosotros, los que nos dedicamos con pasión y amor al baile.

Ahora, quiero citar un párrafo del libro de Laura Norman Reflexología del pie, que me parece que nos incumbe de manera muy particular:

El toque es un acto íntimo. Tanto si es un amistoso apretón de manos, como si se trata de un cariñoso abrazo. Cuando tocamos a otra persona, algo sucede entre nosotros. Si continuamos progresando en el contacto con el otro, el vínculo entre nosotros aumenta. Con la participación y el intercambio nos enriquecemos. Podemos dar presentes, alimentos, tiempo, interés o amor, pero en realidad siempre estamos dando el mismo regalo: a nosotros mismos.
A pesar de que algunas investigaciones concluyen que es el olfato nuestro sentido más desarrollado, lo que explicaría la gran influencia que han tenido últimamente las sesiones de aromaterapia y los tratamientos que tienen diferentes olores como acompañantes, es innegable que el sentido del tacto está involucrado en casi todas nuestras acciones diarias, siendo igualmente importante para nosotros la información que recibimos por el tacto, a través de la piel que es por lo demás el órgano más grande que tenemos en el cuerpo.

Últimamente, la tecnología y la sociedad moderna parecieran estar dando muchos motivos para que no nos toquemos, en lugar de fomentar la proximidad entre las personas. No solo porque vivimos en una sociedad contactofóbica que apenas tolera el contacto entre personas que no sean nuestros seres queridos, sino también, porque muchas personas prefieren las comunicaciones a distancia que son facilitadas por las tecnologías de la información y la comunicación, negándose o restringiéndose así el placer del contacto directo con otros seres humanos. También las circunstancias en diversos contextos, a veces dificultan el contacto personal, o sencillamente, el contacto a distancia se convierte en una estrategia de trabajo como en el caso de la educación a distancia. Pareciera ser, en líneas generales, que con la aparición del lenguaje hablado, la comunicación a través del tacto se hizo cada vez más restringida, hasta convertirse incluso en algo prohibido en algunas culturas.
 

Sin embargo, hay investigadores que defienden la idea de que el tacto es el sentido más importante para los humanos. Los primates pasan aproximadamente el 20% de su tiempo tocándose, una conducta en la que depositan casi todas sus funciones sociales, y en los humanos podría incluso tener mayor importancia. No en vano el tacto es el sentido más desarrollado cuando nacemos. De hecho, las últimas investigaciones ya demuestran que cuanto más contacto físico recibas, más saludable física y psicológicamente estarás.

¿Qué beneficios promueve el contacto físico?

1. Mejorarás tu salud física y psicológica

Cada vez que alguien te toca amistosamente, multitud de receptores de presión en tu piel envían una señal a tu cerebro para que empiece a reducir la producción de cortisol, la hormona responsable del estrés que inhibe la producción de linfocitos, la primera defensa de tu sistema inmune frente infecciones y enfermedades.
  • En un estudio relacionado también se comprobó cómo mujeres que sufrían de profundos dolores de cabeza mejoraban sustancialmente después de recibir masajes, probablemente porque esas señales de alivio emitidas por los receptores de presión llegan al cerebro antes que las señales de dolor.
  • En otra investigación con mujeres se vio que la activación cerebral asociada con la amenaza disminuía antes de recibir una descarga eléctrica si sostenían mientras la mano de su marido. Y en otro ejemplo, los niños que recibieron contacto físico aguantaron más estoicamente una serie de intervenciones médicas.
El contacto también estimula tu sistema nervioso parasimpático, conocido por ser el mecanismo de relajación. Eso provoca que cuando te tocan se liberen hormonas como la serotonina, dopamina y oxitocina, responsables en parte de la sensación de bienestar.
Cuanto más contacto des y recibas, mayores beneficios podrás obtener sobre tu salud: reducirás el estrés, enfermarás menos frecuentemente y te sentirás mejor.

2. Comunicarás mejor tus emociones

Hasta hace poco, la idea de que la gente puede enviar e interpretar señales emocionales a través del contacto físico parecía poco creíble incluso para los investigadores. Sin embargo, en un estudio de 2009 el psicólogo Matther Hertenstein demostró que, con tan sólo tocar a los participantes del estudio era posible comunicar con un 78% de eficacia hasta 8 emociones: gratitud, miedo, enfado, desagrado, amor, simpatía, tristeza y felicidad.

Hasta entonces los científicos creían que el contacto tan sólo podía reforzar las emociones que se comunicaban mediante el lenguaje verbal y no verbal, pero en este estudio se demostró que por sí solo el tacto es capaz de comunicar una gran variedad de emociones.

La cara, por ejemplo tan sólo es capaz de transmitir de forma fiable la alegría como emoción positiva, por lo que el contacto físico parece una forma mucho más precisa de comunicación que las expresiones faciales.

3. Aumentarás tu capacidad de persuasión

Se ha demostrado experimentalmente que tocar a alguien ligeramente en la parte superior de su brazo puede incrementar mucho las posibilidades de que acepte una petición tuya.

4. Mejorarás la imagen que los demás tienen de ti


Tocar no solo te servirá para persuadir, sino para caer mejor a los demás y mejorar la imagen global que tienen de ti.

El cortex insular es una zona cerebral que se activa durante el contacto, pero también cuando experimentas confianza. El hecho de que el contacto esté implicado en la confianza sugiere que es crucial para desarrollar relaciones sociales estrechas

5. Aumentarás tu rendimiento

La explicación de por qué un choque de manos o una palmada puede mejorar el desempeño, tanto en el campo como en la oficina, es probablemente porque reduce los niveles de cortisol, permite confiar más en uno mismo, y relaja la parte prefrontal del cerebro, liberándola para que se dedique a su tarea principal: resolver problemas. Es decir, que un buen abrazo y una palabra de aliento antes de una presentación de baile, puede tener excelentes efectos en el rendimiento de un bailarín, porque aumenta su autoestima y por tanto su confianza en sí mismo.

6. Seducirás mejor

 Gran parte de la atracción se crea a través del contacto. Si no tocas a la persona que quieres seducir lo más probable es que esa atracción no termine de consolidarse.

7. Fortalecerás tus relaciones sentimentales


El contacto cuando bailamos

 

En efecto, también en el baile, el toque es un acto íntimo, porque es entre dos. Porque en  ese toque estamos entregando muchas cosas:

  • Energía. Esta energía varía en las personas. Así como transmiten seguridad, también pueden transmitir inseguridad o frustración.
  • Con la energía, van sentimientos, de aceptación, de rechazo, de afecto fraterno o de amor carnal.
  • Estamos dando indicaciones a la pareja. El caballero indica a la dama qué pasos o figuras quiere que realice. La dama indica al caballero hasta dónde puede llegar según su experticia en el baile. Y así mismo pueden indicarse muchas otras cosas solo con el contacto físico mutuo.
En suma, se establece un proceso de comunicación a través del tacto que es tan importante como la comunicación a través de cualquier otro sentido.


El contacto físico mientas bailamos es INEVITABLE, porque cuando bailamos, no solamente lo hacemos para nosotros: bailamos para nuestra pareja de baile, no importa cuál sea la relación que tengamos con ella, es decir, sea un desconocido o una desconocida, o sea nuestra pareja de  vida. La excepción sería cuando bailamos en solitario.

Y si tocar sirve para gustar más, influir, vincularse con los demás, relajarse, y fortalecer una relación, imagínense toda la importancia que tiene el simple acto de tomar la mano de una persona para bailar y todo lo que pueda estar relacionado con ese acto...

Recomendaciones finales


  • Añade el contacto físico a tu comunicación para transmitir mejor tus emociones y que la gente empatice y se vincule más contigo.
  • Aunque no quieras pedir nada, acostúmbrate a tocar a las personas de tu entorno social más próximo para que te vean como alguien más cercano y confiable.
    Hay que instaurar el hábito del contacto físico para transmitir apoyo mutuo. Esto puede ayudar a mejorar el rendimiento del grupo. Por esto mismo es muy importante aprender a dar masajes, para ayudar al proceso de relajación antes o después del entrenamiento o de una presentación en tarima.
  • Pero también es muy importante que hay que saber cuándo tocar. La mejor forma de iniciar el contacto es con un ligero toque en la parte superior del hombro, no olvidando que hay personas a las cuales no les gusta que las toquen de ninguna manera, por lo cual, es importante saber leer las respuestas de las personas con las cuales nos estamos comunicando.
Si no estás tocando, no te estás comunicando.


Referencias:

 

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